domingo, 9 de diciembre de 2012

Decir adiós nunca resultó sencillo, mucho menos cuando durante tantos años esta fue mi segunda casa. Es dejar un poco de mi vida, de nuestra historia compartida y llena de sentimientos. Hoy todos esos sentimientos los tengo a flor de piel, y es ahí cuando pienso que el día de mañana nunca va a llegar, pero ya se convirtió en el ayer.
Seguro estemos todos de acuerdo en que debemos cerrar etapas, pero esto no es tarea fácil. Nos obliga a recordar lo vivido y sacar de ello, lo mejor. Hoy cierro una etapa más mía que de cualquiera, un logro se ha alcanzado, y cosas gigantes me esperan. 
Me animo dar un paso más porque tengo los brazos suficientes que me pueden sostener por si llego a tropezar.
Me felicitan porque finalicé con un ciclo de mi vida; eso me da alegría, tristeza y también nostalgia. 
Todo se convierte en una mezcla de sensaciones y pensamientos, que se juntan en mi cabeza y revolucionan todos mis recuerdos. Pero… ¿Como se olvida? no recordando, ¿como se recuerda? a partir de los sentidos. ¿Que quiere decir esto? una imagen, o un sonido, o un aroma, me despiertan un recuerdo.
La memoria no esta en la cabeza. Millones de recuerdos inolvidables son lo q nos hacen ser lo q somos. La memoria se podrá dormir, pero nunca se muere, esta en el corazón.
A veces pensar en todo lo que tuve que recorrer para llegar acá, me deja exhausta, y mi cabeza se convierte en una gran máquina del tiempo. 
Fue muy largo este camino, pero pasó tan rápido que me encuentro en una gran paradoja.
Ahora puedo notar cuánto cambié y recién hoy me detengo a pensarlo. 
Me llevo miles de cálidas miradas de esos profesores, que además de cumplir su labor, fueron nuestros maestros de vida. ¿Cómo olvidar … el amor de Mazzola, la dedicación de Boxer, las anécdotas de Volpini y sus hijos y las aprobeishon de Román, las ironías con doble sentido de Rodriguez, la exageración y persistencia de Villalba, el baby Marcos de Monteleone, el “levante la mano para hablar” de Debut cuando naaaaaaadie estaba hablando, los “Give me your libreta, please” indicando que venía un uno de Galeano, esas tardes de ardua gimnasia y estos esbeltos cuerpos que debemos a Mary y a Hernán. Gracias Ale , por ser nuestra psicóloga durante tanto tiempo, y por no haber sabido guardar nuestros secretos (risa), y cómo olvidar a ese Golf persecutor con un hombre enfurecido en su interior derrapando por Calchaquí… eternamente gracias a ellos, y a muchos y muchas más que fueron parte de este camino, dejándo en cada uno de nosotros, lo mejor de ellos.
El fin muy cerca está, y lo afrontare serenamente. Viví con intensidad, jugué sin descansar. Pasé miles de amores, tomé solo lo mejor de cada instante.
Viajé y disfruté, no se si más que otro. Tal vez lloré, reí, gané, perdí. Sé que fui feliz, si lloré fue porque amé. 
Quizás dudé cuando mejor me divertía, o desprecié aquello que no comprendía. 
Hoy sé que afronté ser como era y así logré seguir.
Hoy me subo a un tren con destino a un futuro, que sin dudas me gustaría que sea acompañado. 
La pregunta es… ¿estamos listos? Y la respuesta es, si, estoy listo.













No hay comentarios:

Publicar un comentario